P. Roy, S. Chiat y J. Warwick
F. Alcantud-Marín, Y. Alonso-Esteban y E. Navarro-Pardo.
papel.
15 minutos, aproximadamente.
Desde 1 año y medio a los 5 años
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Permite la identificación rápida y temprana de posibles dificultades en el desarrollo social y cognitivo presentes en el tratorno del espectro autista (TEA).
La ESB se caracteriza por su enfoque integral y fácil aplicación. La evaluación es rápida (menos de 15 minutos) y utiliza una variedad de juguetes y objetos atractivos para los niños, lo que facilita la evaluación de aspectos clave como la capacidad de respuesta social, la atención conjunta y la comprensión simbólica.
La prueba evalúa habilidades sociocognitivas sin requerir respuestas verbales por parte del niño. Esto permite la evaluación de niños que aún no han desarrollado el habla o que pueden tener limitaciones lingüísticas. Las tareas de la prueba están diseñadas para observar comportamientos e interacciones a través de juegos y actividades manipulativas, lo que la hace inclusiva y eficaz para evaluar a niños de diversas capacidades y orígenes lingüísticos.
La ESB incluye tres subpruebas principales:
1. Respuesta social: evalúa cómo el niño responde a las interacciones sociales.
2. Atención conjunta: mide la habilidad del niño para compartir el foco de atención con otra persona.
3. Comprensión simbólica: analiza la capacidad del niño para entender y utilizar símbolos y representaciones.
Una herramienta esencial y práctica para la detección temprana. Ideal para su uso tanto en contextos clínicos como educativos.